lunes, 18 de octubre de 2010

pequeñas, dulces, frágiles


-¿Por qué sonríes?

-No sonrío.

-Sí que lo haces, tienes las comisuras de los labios hacia fuera.

-Bueno, puede que un poquito.

-¿Pero qué dices? ¡Es la sonrisa más grande que he visto en mi vida!

-Me gusta estar aquí y ahora.

-Hum.

-Sonrío porque quiero atrapar este momento. Así cuando vuelva a hacerlo me acordaré de ti, de este lugar. Cuando me ría a carcajadas, los recuerdos como estos me inundaran y seré feliz.

-Entonces, ¿por qué no sonreímos juntos?

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