Enterradme a diez metros bajo tierra.
Entrerradme para que nunca me encuentren.
Enterradme lejos, lejos, lejos, lejos.
Enterradme sonrientes.
Enterradme con las manos limpias.
Enterradme mientras grito. Mientras lloro. Mientras me desgarro. Mientras respiro.
Enterradme con violetas perfumadas.
Enterradme con rosas espinosas.
Enterradme mientras me desangro.
Enterradme en tierra yerma. En tierra sin hierba. En tierra muerta.
Enterradme bajo un espléndido sol de verano.
Enterradme mientas me enfrío.
Enterradme mientras canto.
¡Enterradme, enterradme!
Me gusta esta poesía. Tiene un aire muy clásico, gracias a esa anáfora del "enterradme". El mensaje llega fácilmente y en realidad, el último verso es el que más me ha gustado. Parecía que lo gritaras.
ResponderEliminarPero no entiendo cómo esta puede ser la que más te guste, en el sentido de que "Había una vez una chica..." es para mí lo mejor que hay en tu blog. La he releído varias veces seguidas, y me sigue llegando igual. Me encanta.
Besos,
Sawako :3
Me encanta, Ale. Es... no sé. Me gusta. Mucho.
ResponderEliminar"¡Enterradme, enterradme!".
Enhorabuena.